El impacto climático de la minería de bitcoin en Estados Unidos
#Centro de noticias ·2023-06-28 08:02:10
La minería de Bitcoin es conocida por su alto consumo de energía. Hasta el 25 de marzo de 2023, la demanda eléctrica de los mineros de Bitcoin alcanzaba los 15.4 gigavatios (GW). En la red de Bitcoin, los llamados “mineros” compiten resolviendo complejos problemas computacionales para añadir bloques a la cadena y verificar la propiedad y las transacciones de las monedas contenidas en dichos bloques. Para participar en este proceso, los mineros utilizan equipos especializados que consumen electricidad.
Aunque tanto académicos como defensores del Bitcoin reconocen que los mineros consumen una gran cantidad de energía, existen profundas divisiones respecto al impacto climático de esta actividad. Los críticos consideran que el consumo energético del Bitcoin es un desastre, mientras que sus partidarios lo ven como una característica, no un defecto. Un número creciente de estudios académicos comparan la huella de carbono del Bitcoin con las emisiones de países de tamaño mediano. Al mismo tiempo, los defensores de Bitcoin destacan sus posibles beneficios climáticos, como los servicios de estabilización de la red eléctrica, el apoyo a la expansión de energías renovables, la reducción de emisiones de metano mediante el uso de gas residual o pozos de petróleo abandonados, y el aprovechamiento del calor residual generado por los equipos de minería para actividades auxiliares.
Cabe destacar que durante la tormenta invernal Elliott en América del Norte, en diciembre de 2022, la potencia computacional de los mineros de Bitcoin disminuyó hasta en 100 EH/s, lo que representaba el 38 % del total del hashrate de la red en ese día. Esta cifra constituye una evidencia empírica de que, para diciembre de 2022, al menos el 38 % de la actividad minera de Bitcoin tenía lugar en Estados Unidos y Canadá.
Hemos verificado los argumentos de ambas partes y, con base en los datos de 13 empresas que cotizan en bolsa (las cuales representaban una cuarta parte del poder de cómputo total de la red a finales de 2022), proporcionamos evidencia empírica sobre la escala y la fuente energética de la minería de Bitcoin en EE.UU. Usando el factor de emisión promedio de la red eléctrica, encontramos que la intensidad de carbono de la electricidad utilizada por estos 13 mineros fue de 397 gramos de CO₂ por kilovatio-hora, prácticamente igual al promedio de la red eléctrica de EE.UU., que es de 387 gramos de CO₂ por kilovatio-hora. Además, descubrimos que solo estas 13 empresas generan unas emisiones anuales de dióxido de carbono de 7.2 millones de toneladas, superando las emisiones del estado de Vermont.
Estos hallazgos, basados en el factor de emisión promedio de la red, contradicen las afirmaciones de la industria de que el 58.9 % de la minería de Bitcoin se alimenta con energías sostenibles, ya que la proporción de fuentes no fósiles (energías renovables 21.5 % y energía nuclear 18.2 %) en la matriz energética de EE.UU. es considerablemente menor. Al mismo tiempo, encontramos que los posibles beneficios climáticos de la minería de Bitcoin merecen atención. Por ejemplo, los incentivos financieros de la red de Bitcoin podrían subsidiar medidas para sellar pozos de petróleo huérfanos o no sellados, lo que permitiría una reducción masiva de las emisiones de metano.
La creciente transparencia sobre la ubicación y las fuentes energéticas de los grandes mineros de Bitcoin que cotizan en bolsa pone de manifiesto el valor de las obligaciones de divulgación, y podría ayudar a desmentir afirmaciones infundadas de la industria, mejorar modelos académicos basados en suposiciones, y señalar a los reguladores las áreas donde la minería de Bitcoin podría ofrecer beneficios climáticos compartidos.